enero
20
El cielo belga
En ocasiones, cuando veía un cuadro de artistas centroeuropeos, pensaba que, con el paso de los años, habría ido perdiendo color y difuminándose. Pero, habiendo estado por fin allí, he descubierto que ese cielo existe. Es un cielo difuso, repleto de nubes y niebla que tapan un sol que lucha por salir, pero que, inevitablemente, queda relegado a un segundo o tercer plano. Como si sobre el blanco de la luz del sol hubieran pintado de gris y azul, y luego lo hubieran extendido con el dedo.
P.D. Puede que este no sea el ejemplo más claro visto en una pintura, pero imagino que os haréis una idea 😉
¡Qué preciosidad!
¡Me alegra que te guste! 😀
Pobres…pocas horas de sol y siempre tristón…
Seguro que es de agradecer cuando aquí pega con fuerza en verano…pero sí, en general es un ambiente más tristón :-S
¿Sobre qué hora tomaste la foto?. Es un dato super importante…;)
Pues me parece que fue por la mañana…quizás sobre las 11-12. ¿Por qué es tan importante? 😉
Porque a lo mejor un día de invierno aquí a las 9 de la mañana tendriamos un cielo algo parecido (digo algo) pero claro a las 11 ni de coña…
Eso es verdad…pero no sé si llegaría a ser el mismo (al fin y al cabo, ¿es el mismo cielo el que vemos todos?)
el azul del cielo de Madrid es una de sus características más positivas. Esos días de invierno , de frío intenso se puede ver un cielo azul radiante que no creo que luzcan muchas ciudades europeas: no soy chovinista, solo constato la verdad.
Sí, es cierto, el azul del cielo de Madrid en invierno es una pasada…