junio 24

Búnker de El Capricho

Gracias a Patrimonio de Madrid también pudimos visitar el búnker de El Capricho, construido durante la Guerra Civil y utilizado por el Ejército Republicano. Según nos comentó el guía, es uno de los primeros búnker que se construyeron, puesto que hasta la Guerra Civil española no empezaron a realizarse bombardeos aéreos, por lo que se utilizó como modelo para muchos búnker que se construyeron posteriormente.

Lo más curioso de este es que hubo tiempo para construirlo, y por ello cuenta con pasillos abovedados y alicatado bastante generoso para lo que es habitual. Es muy curioso el uso que hacen de los azulejos, muy variados entre las distintas estancias, para saber en cuál estaban en caso de que hubiese humo y tuviesen que arrastrarse por el suelo. También es interesante la elección de poner los respiraderos en la parte baja de la pared, para que el oxígeno hiciera subir las partículas tóxicas en caso de ataque con gas venenoso.

Además cuenta con un aljibe, de fundamental importancia, puesto que en este espacio podrían convivir hasta 200 personas.

Sin duda se trata de una visita muy recomendable a ese patrimonio (ya no tan) desconocido de Madrid.

junio 14

Frontón Beti Jai

Gracias a las visitas guiadas de Patrimonio de Madrid pude conocer el Frontón Beti Jai, el único que queda de los cinco o seis que hubo en Madrid a finales del siglo XIX, en su época de máximo esplendor. Tras pocos años de uso para su función original se utilizó como concesionario, cárcel, taller de chapa, fábrica o comisaría (entre otros muchos usos), y no ha sido hasta 2011 que se convirtió en Bien de Interés Cultural y 2015 que fue expropiado por el Ayuntamiento para su recuperación y transformación (posiblemente) en centro cultural con cine de verano. Sin duda se trata de un espacio sorprendente cuya visita merece mucho la pena.

Frontón Beti Jai
C/Mejía Lequerica, 3
Madrid
junio 4

Quien a los suyos parece

Pues aquí está el resultado de unos cuántos meses de trabajo para la asignatura de fotografía documental, ¡mi primer fotolibro! El tema elegido por el profesor para este curso fue «Familia», y a partir de ese tema cada uno debíamos hacer nuestro trabajo. Partiendo de esa idea me decanté por los parecidos, que es algo que siempre me ha llamado la atención, y para mostrarlo en el trabajo decidí hacer dos mini proyectos:

  • El primero consiste en mezclar las caras de mi familia, por un lado de los adultos y por otro de los niños, de modo que se obtengan nuevos rostros mezcla de las distintas partes de nuestras caras.
  • El segundo es de fotos de familiares que se parecen, ya sea por rasgos comunes o por gestos. Las hay de padres e hij@s, herman@s, etc.

¡Pasen y vean! (perdonad que el video no sea muy allá, otra cosa que mejorar…jeje)

A modo de reflexión sobre este trabajo, he descubierto que puede dar mucho juego, porque algunos de los retratos compuestos por partes distintas recuerdan a otras personas de la familia (aunque también parezcan esos retratos robots que hacen de los criminales con una simple descripción, jeje). Por otra parte, y a nivel personal, reconozco que resulta muy satisfactorio ver el resultado del trabajo en papel, aunque también soy crítica con ello y veo que podría haber hecho cosas mejor en cuanto a iluminación, cuadre de unas caras con otras…Pero me quedaré con la idea de que es un proyecto interesante que podría mejorar y complementar en un futuro.