febrero
8
Estambul y la bella Santa Sofía
Volví a Estambul después de 10 años de mi primera visita. Encontré la ciudad cambiada, con mucha más vida, o quizás fuera yo la que había cambiado (al ser uno de los primeros viajes que hice sin compañía paterna, me daba más miedo callejear y perderme, estaba menos suelta a la hora de hablar con los oriundos). Sea como fuere, me volvió a parecer una ciudad preciosa, digna de ser visitada. Y, entre sus grandes iconos, está Santa Sofía, que ya en su momento me emocionó conocer porque la había estudiado muy detenidamente en Historia del Arte.
Después de 10 años Santa Sofía sigue en obras, pero, aún así, volvió a enamorarme.
Im-presionante
¡Pues la verdad es que sí!