Un lugar de cuento: Odense
Tokio y la paradoja de las macro ciudades
En Tokio sentí mucho más que en cualquier otra parte el choque cultural.
Me agobió la masificación de gente, ruido, anuncios, luces y estímulos en general, pero sobre todo me hizo sentir una profunda soledad.
Menos mal que la ciudad esconde espacios para el reencuentro con la idea de humanidad y con una misma.
Atardecer en el Támesis
Atardecer en la nueva Málaga
El pasado noviembre, con un clima que parecía primaveral, conocí la nueva ciudad de Málaga, esa renovada urbe cultural de al que tanto se habla últimamente. Realmente no tenía casi recuerdos de la ciudad, a pesar de haberla visitado en varias ocasiones, pero puedo decir que, a partir de ahora, sí me acordaré de Málaga. Y la recordaré como una ciudad repleta de gente y museos, con un casco histórico renovado con la alcazaba presidiéndolo, un puerto reconvertido en espacio social con tiendas, restaurantes y paseos accesibles. En definitiva, como una ciudad dispuesta a permanecer en la memoria.