Uno de los edificios de Madrid que siempre he querido conocer es el Hospital de Maudes, y este año he podido hacerlo gracias a Open House Madrid (no me cansaré de decir que es un evento genial).  Entre  Cuatro Caminos y Nuevos Ministerios se encuentra esta gran estructura, cuya finalidad originaria fue ser un hospital de asistencia sanitaria a jornaleros.

El edificio, que llama especialmente la atención por su vista aérea imitando una calavera, no es en realidad tan tétrico como podría parecer por dicha imagen. Se trata de un edificio luminoso, decorado con cerámicas coloridas, cuyos grandes ventanales te dirigen a diversos jardines que te asilan del bullicio de las calles cercanas; el lugar idóneo para los convalecientes.