Conocidos como los «mini Alpes» por su parecido con los Alpes suizos pero en miniatura, los Altos Tatras forman parte de la cadena montañosa de los Cárpatos, y se encuentran divididos entre Eslovaquia y Polonia. La vertiente eslovaca parece ser un lugar muy visitado a nivel nacional, destino de esquí en invierno y de senderismo en verano, por lo que dispone de una infraestructura hostelera y de transporte adecuada que facilita la estancia a la falda de estas montañas.
Como cumbres a destacar están Lomnický (2634 m.), donde es posible llegar mediante un funicular (que conviene reservar on-line previamente) y Kriván (2494 m.), un icono nacional que aparece en las monedas de 1, 2 y 5 céntimos, y en cuya cumbre se encuentra la cruz que forma parte del escudo eslovaco (y que aparece también en las monedas de 1 y 2 €).